El presidente del Parlamento de Cantabria, el socialista Joaquín Gómez, ha
señalado este domingo en el discurso que con motivo del 42 aniversario de la
Constitución, que frente “a las tentaciones populistas”, frente a quienes insisten
en desprestigiar a las instituciones y atizar la hoguera de la crispación política y
dividirnos como sociedad, “los demócratas enarbolamos la bandera del diálogo
y la misma vocación de progreso y acuerdo que inspiró el proceso
constitucional del 78”.

Gómez ha afirmado que esta celebración sirve para reivindicar ese legado de
consenso y para inspirar el sosiego necesario “para trabajar juntos, desde la
lealtad institucional”, por una pronta recuperación sanitaria, social y económica.
El presidente de la cámara ha destacado que la Constitución “disolvió las
sombras de una España negra” con un “memorable pacto cívico de
extraordinaria concordia y generosidad”. Además, ha calificado el proceso
constituyente del 78 como un “pacto histórico que aún evocamos como ejemplo
de lo mejor que hemos hecho como sociedad: construir, juntos, por encima de
nuestras diferencias, un futuro de libertad”.

Así, ha recordado que nuestra Constitución es especial “porque nos dio la
libertad y nos ha ofrecido el marco jurídico necesario para favorecer el
crecimiento económico, el desarrollo social y el pluralismo político”.

Ha sostenido también que el pluralismo, la crítica y la discrepancia garantizan
el debate de ideas y posturas, algo “imprescindible para el progreso de la
sociedad”. Pero para ello, ha puntualizado, “los ciudadanos debemos estar
informados por unos medios de comunicación profesionales, rigurosos y
éticos”, ante la amenaza de propaganda que circula “disfrazada de veracidad,
para confundir y enfadar de manera interesada a los ciudadanos, y para
desacreditar a los adversarios”.

“La desinformación, la confusión entre la verdad y la mentira, altera
sustancialmente el derecho a la información que tenemos los ciudadanos”, ha
remachado.

Gómez, que también ha tenido un sentido recuerdo para las víctimas de la
pandemia, ha finalizado señalando que gracias a la Constitución, la sanidad
pública, las pensiones y los servicios sociales se reivindican como derechos de
los ciudadanos que los gobiernos “deben preservar”.