Santander, 23 de septiembre de 2020. La portavoz parlamentaria socialista y secretaria de Organización del PSOE Cantabria, Noelia Cobo, ha presentado en el Parlamento de Cantabria una proposición no de ley proponiendo una batería de medidas tendentes a reforzar la lucha contra la explotación sexual y el tráfico de mujeres, niñas y niños.
Cobo ha explicado que la prostitución es una forma de explotación y en ningún caso una profesión que haya que regular jurídicamente dado que estamos ante una “manifestación de violencia de género extrema”. “Lo que las mujeres prostituidas y hombres tienen que soportar es similar a lo que en otros contextos correspondería a la definición aceptada de abuso sexual y violación reiterada”, ha señalado.
La diputada socialista se ha posicionado del lado de las víctimas y en contra del negocio del sexo, que se nutre “del sufrimiento, de la explotación de las mujeres, niñas y niños más vulnerables, violando todos sus derechos”.
Además, se ha comprometido a que desde el PSOE se va a trabajar para abolir la prostitución y erradicar la trata de seres humanos con fines de explotación sexual, defender la dignidad de las mujeres y terminar con las redes y las mafias que se lucran explotando a las mujeres, niñas y niños.
“No es posible cumplir con el principio de igualdad de nuestra Constitución si miramos para otro lado con la normalización de violaciones de derechos humanos en prostíbulos, pisos y calles de Cantabria y España”, ha afirmado.
Medidas propuestas
Para acercarse a la solución de esta lacra, el PSOE propone que el Gobierno de Cantabria este establezca, en coordinación con el Gobierno de España, los mecanismos necesarios para desarrollar políticas de prevención para atajar las causas, disuadir la demanda, medidas que contribuya a la reducción de la oferta y a eliminar las redes de trata y tráfico de mujeres.
La número dos de los socialistas de Cantabria propone también reforzar la coordinación entre las diferentes fuerzas de seguridad del Estado y de las organizaciones que luchan por la abolición de la prostitución para el control de los pisos privados y otros establecimientos donde pueda haber sospecha de situaciones de prostitución y proceder a su cierre.
Otra de las estrategias que proponen es habilitar un plan de alternativa habitacional para mujeres en situación de prostitución y un plan de recuperación social que garantice asesoramiento, formación y emancipación de aquellas mujeres en situación de prostitución que deseen salir de ella, contando con las organizaciones de apoyo a mujeres en situación de prostitución.
Finalmente, consideran fundamental intensificar la vigilancia por parte de las Administraciones Públicas para identificar los casos de trata con fines de explotación sexual con objeto de eliminar la explotación sexual y los fines lucrativos de los proxenetas, además de realizar campañas de concienciación para el conocimiento del problema de la explotación sexual y su prevención.